El mantenimiento preventivo es el destinado a la conservación de equipos o instalaciones mediante la realización de revisión y reparación que garanticen su buen funcionamiento y fiabilidad. Este mantenimiento se realiza en equipos en condiciones de funcionamiento, por oposición al mantenimiento correctivo que repara o pone en condiciones de funcionamiento aquellos que dejaron de funcionar o están dañados.
Este servicio tiene como primer objetivo evitar o mitigar las consecuencias de los fallos del equipo UPS (sistema de alimentación ininterrumpida), logrando prevenir las incidencias antes de que estas ocurran. El mantenimiento preventivo debe evitar los fallos en el equipo antes de que estos ocurran.
El mantenimiento preventivo comprende procedimientos de ajustes, inspección, limpieza, evaluación de cada uno de los monobloques que componen los bancos de baterías, chequeo y medición de los parámetros de control y funcionamiento del sistema UPS, voltajes y corrientes de entrada y salida, chequeo de la lógica de comando, etapas de potencia, control, panel mímico y pruebas de respaldo diseñadas según recomendaciones de ANSI/IEEE STD 446-1995, para reducir fallas de los equipos y extender su vida útil.